Gobierno ciego, sordo y mudo ante demanda de productores de Condega

“…Ser campesino y productor en un delito en Nicaragua…”

“…Ayer estuvieron bajando gente de los buses y todo el que era hombre y era del campo lo echaron preso…” (Agustín Herrera)

Por Duyerling Ríos, Onda Local

“…sacando la cuenta ahorita con la cosecha de frijol, a una manzana se le invierten tres mil córdobas solamente en lo que es limpia, recogida de broza y si la va a quemar… más la siembra le cuesta como dos mil córdobas, allí se suman cinco mil, después de eso tenemos que esperar un tiempo determinado trabajando… tenemos que hacerle la inversión, el abono ahorita está a mil doscientos el quintal, un litro de veneno, el más barato está a cuatrocientos córdobas… esperar la floración dos mil córdobas de allí sumándole se perdería la cuenta, si hacemos la suma salimos perdiendo…” Quien así se expresa es Salomón Espinoza, productor, de la comunidad de Rodeo El Bramadero, en Condega. Forma parte de los mil productores condeganos que protestan desde hace cuatro días,  por  los bajos precios que reciben por cada quintal de frijoles.

Las y los campesinos de Condega reclaman que se cumplan los acuerdos que hicieron con la Empresa Nicaragüense de Alimentos Básicos, ENABAS, de liberar las fronteras, facilitar los trámites de exportación, los aranceles y pagar precios justos de los granos básicos.

Productor herido de bala durante las protestas en el municipio de Condega

 Ante la ausencia de diálogo de parte de autoridades de gobierno, las y los productores decidieron trasladarse a la cabecera municipal y exigir que se encuentren canales de comercialización justo, que venga a contribuir con la reducción de necesidades que tienen en el campo.  “… Parece que las puertas están cerradas, no quieren negociar…”, asegura Wenceslao Ruíz, de la comunidad Plan de Grama y es que a pesar de las cartas enviadas al gobierno, no han tenido respuesta.

Agustín Herrera, uno de los productores participante de la protesta, denunció los abusos de poder de parte de los antimotines de la Policía Nacional, quienes les desalojaron de la vía  principal con bombas lacrimógenas. “…Nos tratan como si fuéramos delincuentes… anoche la población cómo sufría, gritaban las mujeres, los niños lloraban, si te miran pinta de campesino te echan preso…”

Jairo Amador, de 25 años de edad, hijo del productor  Martín Amador y hermano de Elvin Amador, este último trabajador del Minsiterio Agropecuario y Forestal, quienes fueron golpeados por los antimotines. Los dejaron libres una hora después, por órdenes del Alcalde de Condega Jairo Arce, quien los reconcoció.

En horas de la noche de ayer dos de septiembre, una comisión de productoras y productores se reunió con el alcalde sandinista Jairo Arce, el Subcomisionado Ernesto Matías Hernández jefe de la PN en Condega y el párroco Simón Videa.

De acuerdo al concejal sandinista Leonel Rodríguez, “hay situaciones del municipio que se escapaban de la municipalidad…”. Lo cierto es que en tres días de protesta, el alcalde Arce no les había dado la cara a las y los productores. Fue hasta ayer noche que se vieron con las autoridades municipales.

Elvin Amador, hijo de Martín.

A la negociación, el Subcomisionado Hernández afirmó que traía “la orden de arriba de negociar únicamente la liberación de los presos a cambio del retiro del tranque hacia el río que dista a dos kilómetros del pueblo; y el pago de la ambulancia que fue quemada en los enfrentamientos”.

Hasta las diez de la noche, no había acuerdos, dada la demanda policial. Las y los productores estaban de acuerdo con deshacer el tranque siempre y cuando soltaran a las personas detenidas. Pero, no hay consenso en la cifra de detenidos, mientras la PN afirma son dieciséis personas, las y los productores manifiestan no tener una cifra exacta ya que hay detenidos en Condega y también en Estelí.

Denis Navarrete, periodista, la Polocía lo sacó de su casa y lo agredió sólo porque andaba un pañuelo amarrado en la cara.

Hoy, a partir de las diez y treinta de la mañana continúan las negociaciones. Las y los productores se mantienen firmes en no aceptar el pago de la ambulancia puesto que afirman que eso lo hicieron los antimotines.